En este gran actor británico tenemos un ejemplo de cómo un compromiso con la propia identidad sexual puede cambiar, para bien, el curso de una carrera. En los años 50's se especializó en, mejor dicho se vió obligado a interpretar, papeles de galán en comedietas insustanciales y sin mayor interés. En 1961 aceptó interpretar el papel protagonista de un hombre homosexual, en una película, más que fuerte para la época, que ningún actor se atrevía a interpretar por temor a que afectara negativamente en sus carreras, Victim de Basil Dearden. El papel era muy bueno y a Bogarde no le importaron las consecuencias. La película ayudó a cambiar las leyes que afectaban a los homosexuales en el Reino Unido gracias al empeño de Harold Wilson en 1967. En sus memorias, Bogarde declaró que había tomado la decisión más sensata de su vida. Esta decisión le permitió comenzar una deslumbrante carrera que incluye, entre otros, trabajos a las órdenes de Joseph Losey, El sirviente 1963 y Rey y patria 1964; Alain Resnais, Providence 1977; Luchino Visconti, La caida de los dioses 1969 y Muerte en Venecia 1971; Rainer W. Fassbinder, Desesperación 1977; Lliana Cavani, Portero de noche 1973... Sus mejores interpretaciones presentan a un actor sutil ideal para personajes ambigüos y con rasgos enigmáticos, como alquien que tiene miedo de ser descubierto. En 1992, Dirk Bogarde recibió el título de sir. Nunca se casó. Durante varios años compartió su hogar con su representante Anthony Forwood, pero negó varias veces que su relación fuese algo más que amistad. En su autobiografía reconoció su homosexualidad.
Londres 1921 - 1999
Gracias a MIRACOMOVAN.COM
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Aunque la vida privada es justo como se desee, no es justo estar obligado a tener media vida en la sombra... es como vivir solo la mitad....
ResponderEliminarsaludos desde mi lejana galaxia
Como muchos otros de su época, se vieron obligados a renegar de su homsexualidad, para poder seguir en la cima, para poder seguir formando parte del Perfecto idealista "star system", aunque al final de sus días, como en el caso de Rock Hudson, decidieran contar su verdad, y en cierto sentido, dar una bofetada a los manipuladores de ese mismo sistema.
ResponderEliminarHay quien lee y no lee.
ResponderEliminarDirk Bogarde es un ejemplo de hombre y artista consecuente y respetable, consigo y los demás, con su época y el futuro, con su arte y el mundo.
Tal vez le dió más importancia a su carrera artística, porque sabemos poco de su vida afectiva (lo cual fue su propia decisión). Como vivió en la difícil Inglaterra de postguerra, se dedicó en sus inicios a jugar al galán ideal hasta la liberadora década de los 60 y luego se convirtió en el símbolo de la misteriosa ambiguedad sexual, que buscaba su lugar propio en la nueva sociedad. Favorito de los mejores cineastas europeos del siglo XX, sus films tienen la atmósfera pesada exacta para sus personajes atormentados y reprimidos que ansiaban el cambio y la tolerancia por ser diferente. La misma actitud humana que debiera ser ruta y referente socio-existencial al homosexual moderno tan light y desbocado.
Por eso Bogarde es uno de mis grandes actores preferidos (me habría encantado ser El sirviente).
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